El Espíritu Santo Parte 3

Seguimos con nuestro estudio acerca del Espíritu Santo porque queremos que conozca mejor a esta persona de la Trinidad que no muchos hablan pero que es igual de Santo, Poderoso y Perfecto. 

Hoy veremos que hace el Espíritu es las personas que ya somos salvas por medio de Cristo. Comencemos:

1. ¿Donde vive el Espíritu?

Vive en los creyentes. Antes personas como David, Abraham y demás personas del tiempo del Antiguo Testamento nunca tuvieron este privilegio inmerecido de tener al Espíritu viviendo dentro de ellos pero nosotros sí. Es una hermosa promesa que nos dio Jesús. 

es decir, el Espíritu de verdad, al cual el mundo no puede recibir porque no lo ve, ni lo conoce; pero ustedes lo conocen, porque permanece con ustedes, y estará en ustedes. San Juan 14:17

2. ¿Qué nos hace el Espíritu cuando creemos en Jesús? 

Nos sella. Es un sello poderoso que NADA ni NADIE puede romper. Es la seguridad de la Salvación eterna para los que creemos en Cristo y su sacrificio. ¡Qué lindo!

También ustedes, luego de haber oído la palabra de verdad, que es el evangelio que los lleva a la salvación, y luego de haber creído en él, fueron sellados con el Espíritu Santo de la promesa, que es la garantía de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria. Efesios 1:13-14

3. ¿Qué debemos hacer nosotros con el Espíritu? 

Es nuestro deber llenarnos del Espíritu Santo. Tenemos dos opciones o llenamos nuestro corazón y vidas de cosas del mundo o lo llenamos del Espíritu. Esto es trabajar en nuestra relación con el Señor, nuestra forma de ser, nuestro corazón. No debemos poner triste al Espíritu haciendo cosas mundanas, debemos dejar que Él tome control de nuestras vidas y nos guíe. Hay que dejar muy claro que ser llenos del Espíritu Santo no es lo mismo del bautismo del Espíritu. Eso ocurrió una única vez en el día de Pentecostés, una celebración Judía hace muchos años cuando el Señor Jesús se fue. Son cosas muy diferentes, llenarse del Espíritu es llenarse de obediencia a su voz que está dentro de nosotros.

No se emborrachen con vino, lo cual lleva al desenfreno; más bien, llénense del Espíritu. Efesios 5:18 

¿Aún no estás sellado por Espíritu? ¿Aún no eres Salvo? Solo necesitas creer en Jesús como Salvador, reconocer tus pecados y creer que al pedir perdón sincero la sangre de Jesús te limpiará para siempre. ¡Que hermoso!

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